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Comentarios 24 mayo 2014


17 comentarios:

  1. Juanjo Fernández24 de mayo de 2014, 3:47

    ¿ Perdonará la Divina mujer el pisar la cabeza al maldito Lucifer ? NO

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    1. Si levantase el pie, la serpiente nos comería.
      Eso quiere decir levantar el pie en este caso, tener atado al diablo, para que no hiera a los justos.

      El perdón se refiere más a la memoria, a los sentimientos que guardes hacia alguien.

      Porque si ese alguien es peligros, deberá está en la cárcel, perdonado y todo pero en la cárcel.

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  2. ¿Por qué hay personas malas?
    Ya, esa pregunta me la hice desde muy pequeña y he pasado muchos años dándome respuestas, algunas me convencen y otras de plano no son ni siquiera un justificante.
    Y luego de ver esa adorable imagen del niño disfrazado de monstruo y la declaratoria desear mal a nadie y perdonar las faltas recibidas, yo quiero compartir una frase, que me encontré por ahí:

    "Yo no tengo enemigos, tengo fans confundidos"
    Ver frase en imagen

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  3. Creo que los enemigos todos los tenemos, aún cuando no nos demos cuenta de ello, aún cuando no les hayamos hecho nada a algunas personas, simple y sencillamente no les caemos bien y son capaces de hablar mal y lo peor tratar de envenenar a otros con sus criterios negativos, perdonar es sanar, lo he escuchado tantas veces, y es cierto, y lo primero que sana es el alma, aunque también el cuerpo participa, es un ejercicio que debemos practicar continuamente, para liberarnos, para sanarnos. La foto del post es muy bonita. Saludos.

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  4. Tan importante es perdonar como sentirse perdonado,tanto por los demás como,esencialmente,por Dios. Perdonar es conceder al otro,al que te ha dañado,una segunda oportunidad. Lo malo es que el perdonado ha de sentir que quiere serlo porque si no es así,el perdón no hace efecto.
    Confío en la misericordia de Dios.

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    1. El perdón debe hacer efecto, si, es su meta, pero también es un forma de purificar el alma del que perdona.
      Y una forma de elevar el alma del que perdona.

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  5. Enemigos los vamos a tener Fortea, vayamos donde vayamos y hagamos lo que hagamos, bien, mal, o perfecto, tendremos enemigos. El enemigo nos precede, llega antes que nosotros, cuando llegamos él nos está esperando, y hasta que no tenga cazada la presa no parará, cazarla y dejarla malherida, este es su objetivo. ¿Se puede huir de la trampa del cazador? El salmo nos dice que si, que se puede huir, también nos dice que es Cristo resucitado quien nos libra de la trampa del cazador, nos dice también que la trampa se rompió, y escapamos. Luego os diré que es lo que hace que la trampa se rompa y escapemos.

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  6. María Auxiliadora, ruega por nosotros

    Madre amable de mi vida auxilio de los cristianos, la pena que me atormenta, pongo en tus divinas manos. Dios te salve María...

    Tú que sabes mis congojas, pues todas te las confío, da la paz a los turbados y alivia el corazón mío. Dios te salve María...

    Y aunque tu amor no merezco, no recurriré a Ti en vano, pues eres madre de Dios y auxilio de los cristianos. Dios te salve María...

    Acuérdate, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a tu protección haya sido abandonado; animado con esta confianza, me presento a ti. ¡Oh Madre de Dios!, no desoigas mis súplicas; escúchalas y acógelas benignamente, ¡oh clemente, oh dulce Virgen María!
    (Pedir la gracia que se desea y rezar una Salve)

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    1. Este comentario, no habia sido moderado por mi, sino que de forma automatica entró en la bandeja SPAM, y cuando me he dado cuenta, lo he restablecido.

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  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  8. Hay personas que te atacan instintivamente.
    Una vez, en una manifestación por la vida, me crucé la mirada con una mujer y sacó instintivamente la cara hacia adelante y me miraba como para atacarme.
    Esto no es paranoia, es una realidad.
    Yo pensaba, si no la conozco, ¿ que la habré hecho? nosotros íbamos en su dirección y la miré alguna vez y seguía como culpabilizándome de algo, no se de que que.
    Decidí no volver a mirarla y pasar delante suyo con la cabeza alta.

    Estas cosas pasan, aunque a algunos les parezca un cuento.

    Hay personas que somos quizás ( por racionalizarlo) algo miedosas, y llevamos ese miedo o timidez en el rostro y los que son muy institivos nos atacan sin saber porqué. Me gustaría saber que pensaba esa señora , de unos 45 años en ese momento.

    Una vecina mía, cuando le abrí el ascensor, no se porqué, no tengo ni idea, meneó la cabeza como diciendo; eso no se hace. Luego la dejo quieta como dándose cuenta de que yo no había hecho nada, ni en ese momento ni nunca.

    Si la primera señora de la que hablo, imaginemos que me la hubieran presentado y formase parte de su panda, seguro que hubiera hablado mal de mi, etc.

    Estas cosas me pasan con cierta frecuencia.
    Frecuencia digo, no se 5 veces al año, pero para ser tan irracionales y absurdas son muchas.

    Me han ocurrido toda mi vida.

    Por eso, tengo miedo de la gente, en general la tengo miedo. Lo que no quiere decir que me mueva con toda normalidad por la vida, y que los que me conocen ni adivinasen lo que pienso.

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  9. El perdón se puede definir como la gestión práctica del alma.

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  10. Pues a mi me gustaría que Dios hiciese 1º Justicia.
    Me gustaría saber como nos juzga Dios a cada uno, porque ahí veremos la verdad, sin ninguna duda. Veremos por fin la realidad.

    Y si luego Dios quiere ser Misericordioso, es asunto de El, obviamente.

    Pero me gustaría mucho primero ver su justicia.

    Hay quien dice que en el Juicio final, serán los justos, los que se sentaron a la mesa de Dios los que juzgarán a la humanidad.

    Eso no me gusta. Me gustaría que fuese Cristo quien nos juzgase uno por uno. Pero si son los hombres de Dios los que participará en el juicio final habrá que pasar por ello. No nos quedará otra.

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  11. Queridos amigos, ya estoy con vosotros. No voy a continuar el comentario que dejé pendiente sin agradecer a Caminat su nueva aportación, he abierto un archivo en mi ordenador con sus comentarios, los quiero tener copiados para que no se me olviden, las buenas aportaciones no tienen porqué ser siempre las de los gigantes de la espiritualidad, algunos sabéis por mis blogs que me gustan los gigantes de la espiritualidad monástica, de hecho recordaba ayer una de las cosas que dijo Dom Ambrose Southey respecto al pecado de nuestros padrastros Adán y Eva, pero también la gente sencilla puede ser y de hecho es, un gigante de espiritualidad.

    Dicho esto continúo: Como rezamos en el salmo:

    “Hemos salvado la vida, como un pájaro
    de la trampa del cazador:
    la trampa se rompió, y escapamos”.

    Podemos empezar preguntándonos qué es lo que hace que la trampa se rompa y entonces podemos escapar, sólo escapamos cuando la trampa se rompe y esto hay que tenerlo claro. Según mi experiencia sólo hay una forma para que se rompa la trampa y podamos escapar, la trampa sólo se rompe con la humildad. Es la humildad la que hace saltar el cepo. Pero la humildad que necesitamos para que se rompa la trampa del cazador es un don; el don de la humildad, y esto quiere decir que tenemos que pedirla, y por tanto necesitamos oración. ¿Cuánta oración?, la que el Señor nos pida para concedernos el don de la humildad, a veces no será una cuestión de cantidad sino de calidad, de empeño, de tesón. Con la humildad el enemigo no desaparecerá, seguirá estando ahí, pero desaparecerá nuestro desasosiego, nuestro rostro se endurecerá y podrá aguantar sus golpes no lesivos para nosotros, viviremos con paz lo que antes vivíamos con angustia.

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  12. Fortea:
    Me parece absurdo que alguien te odie o quiera hacerte daño. Y esto asi porque tu te desenvuelves en un ambiento santo (por lo menos esto es lo que se piensa o se dice). Un tipo Buena-gente como tu, no creo que provoque ninguna animadversion injustificada.
    Pero parece que hay algunas personas que te molestan. Y tu muy sutilmente se lo adviertes. Y pobre de ellos, porque tu tienes poder para aplastarlos como un insecto. O no es asi?
    PALABRA.

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  13. Por. Los. Prejuicios, nos. Creamos a nuestros propios. Enemigos

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