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Estoy de acuerdo con Ud. Padre Fortea, pero quizás a nosotros que somos de una ( o varias ) generación posterior, nos es más fácil culparles a ellos de las cosas que no hicieron bien. Si nosotros hubiéramos estado en su piel...¿qué habríamos hecho? ¿Habríamos sido capaces de ir en contra de la gran corriente descristianizadora y deshumanizadora de esos años que ahora queda afincada, en especial en las capas bajas de la sociedad?
ResponderEliminarHay que empezar de nuevo, cada dia. Y si, en nuestro empeño diario por amar a Dios y al prójimo, anunciando a Jesucristo, acaban persiguiéndonos o matándonos, será designio del Señor que tendremos que abrazar con amor y esperanza de Vida eterna junto a Él.
Daremos buen testimonio de fe para bien de todos, con la gracia del Señor.
La Virgen, nuestra Señora, nos asista ahora y siempre.
En tiempos de transición había mucho complejo de ser de derechas y católico.
ResponderEliminarAquello se asociaba con el franquismo, y lo retrógrado.
El progreso era Europa.
Los comunistas y socialistas explotaban ante los jóvenes su victimismo y lo mucho que habían sufrido durante la dictadura, cuando realmente fueron atroces verdugos en la Guerra Civil, Su propaganda fue como siempre eficaz, lo único que hacen bien son las campañas propagandísticas.
Había pequeñas revueltas universitarias, y mucha gente joven se dejó manipular por estos comunistas siendo algunos de ellos hijos de gente de derechas.
El espejo de muchos españoles eran Francia e Inglaterra donde se podía abortar y ver pornografía porque para muchos nosotros éramos un país anticuado y estancado.
La píldora anticonceptiva era lo más inn, una mujer moderna tenía que consumirla, y tomar ejemplo de en Francia donde las madres se las daban a sus hijas y esa era para las izquierdas una sociedad de verdad avanzada.
Hasta en colegios conservadores se criticaba a Franco y se miraba con admiración a los países Europeos con sus porno-avances.
Había muchos curas comunistas, fruto del complejo de que la Iglesia era franquista, y eran considerados los auténticos por mucha gente.
De hecho José Luis Martín Vigil escribió un libro titulado: "los curas comunistas", apológico, claro.
Un problema de España era el sentimiento de inferioridad generalizado, por ser católico y no tan moderno como Estados Unidos, Francia o Suecia.
Faltó el orgullo de vivir en la Verdad, el orgullo de seguir a Cristo.
De todas formas la ofensiva comunista y socialista fue impresionante, basada sobre todo en lo que no fueron; víctimas.
Ignoro la forma de actuar de la Iglesia en ese momento, yo era pequeña y todo esto lo sabía y percibía de lo que escuchaba a mis mayores.
Desgraciadamente Franco fue censurado y condenado por estos países progres, " avanzados " y eso a los españoles les hizo sentirse aislados y distintos del resto de Europa, A pesar de que en ese momento éramos una de las primeras potencias mundiales.
También hubo muchos españoles que veían en Europa un mundo desquiciado y sentían que se vivía mejor en España.
La juventud socialista hablaba y criticaba mucho a España, la desprestigiaban desde dentro y desde fuera del país.
Eso recuerdo que me impactaba mucho, era una mentalidad venenosa que a la larga nos ha hecho mucho daño.
Anoche mandé un comentario ya en el día de hoy, y me ha extrañado no verlo publicado. No sé a qué se habrá debido.
ResponderEliminarYa me extrañó esta mañana cuando he visto que no había comentarios.
Me gustaría saber si fuera posible que ha pasado.
Hola Isabel, quizas no lo enviaste bien, pues no recuerdo haberte borrado un comentario.
EliminarPues seguramente ese habrá sido el problema. No podía ser otro porque en él coincidía plenamente con el comentario del Padre Fortea en su primera parte, y eso sí, esperaba que se equivocara en la segunda, por el bien de la Iglesia que somos todos los cristianos, (para mí los católicos son los cristianos de verdad, así que cristianos).
EliminarAcabo de ver la película completa "Becket", y he de decir que apenas la recordaba y me ha encantado; me ha parecido extraordinaria tanto la historia en sí, como la interpretación. En ella se ve una vez más, como hay hombres muy superiores a la media; hombres honrados con fuertes principios, incorruptibles por el poder y dispuestos a todo, incluso a dar la vida por ser fieles a su conciencia y/o a sus ideas.
Un saludo afectuoso.
Un saludo afectuoso.
Yo siempre soy optimista y los presagios apocalípticosociales prefiero cortarlos de raiz como a las pesadillas o la chismografía, son malos habitos del pensamiento que conducen , mas que a buscar soluciones a deprimir y entorpecer , necesitamos en estos momentos toda nuestra energia y claridad posibles para enfrentar las pulsiones descristianizadoras que vivimos. Es el gran reto de nuestros tiempos.
ResponderEliminarPero no puedo menos que darle la razón al padre Fortea. Ya son demasiados signos observables del plan oscuro contra nuestra iglesia. Y no sólo en España, se extiende a todo el mundo.
Aún así esta crisis de valores, como crisis en sí, también tiene la posibilidad de aprovecharse para el bién. Van a tener que decidirse muchos indecisos, Los tibios se enfriaran y los decididos de actuar por Jesús y el bién se definirán con claridad. Por lo menos sabremos quién y de que lado estarán. ya no podrán actuar a doble cara, los infiltrados se revelaran.Las Caram y Forcades ya no podrán hacer sus jueguitos y malabares filosófico morales.
Si por ello hay que sacrificarse, pues se hará lo que se deba hacer cuando llegue el momento.
Las poderosas armas de la oración y la fé se probarán entonces . Saldremos fortalecidos de todas maneras aquí o allá. De este o del otro lado.