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Comentarios 2 octubre 2014


13 comentarios:

  1. Más que atrasada, desconozco las últimas desavenencias del blog foro. Queriendo publicar desde hace 3 post, con la soberanía, los escudos y ahora las catedrales.
    En el primero de la soberanía había pensado comentar sobre el hecho de que para Dios no existen las naciones solo su creación, la humanidad.
    De los escudos, inciso
    Más vale un gusto que cien panderos.
    Me sorprende y me llena de gusto al mismo tiempo el seguir notando esos brillos de su personalidad anotados en 2 líneas y hasta en una palabra que sacan una sonrisa, aunque sea pequeñita.
    Vaya, apenas acabo la tanda de los otros sermones cuando ya hay nuevos, jejeje.
    Y para el último post yo solo apuntaría que una teoría que se me ocurre a que muy de repente ya no se hicieran tales catedrales luego de esos papas pecadores del renacimiento, es debido a que eso eran a pesar de lo que le ofrecían a Dios (que poco le podemos ofrecer).
    Me recordó a la situación del novio que se porta mal con la novia y hasta le es infiel, pero que ante todos le lleva flores y le da miles de halagos y regalos, mientras que la pobre sabe que le es infiel, al final la chica , si es sabia, le despacha, lo despide y hasta lo que le ofrecía, aunque muy muy bueno , lo desecha.
    E de imaginar que algo semejante pase con tanto hermoso arte de la antiguedad , que aunque muy ostentoso, admirable y todo eso... Dios no le quiso simplemente porque supo bien de donde provino, y ese no era del corazón, ni de esa digamos, sana intención. (Sepulcros blanqueados???)
    En fin, ya me desquite de tanto tiempo en apariencia sin venir por aquí.
    Le pido a Dios que les bendiga a todos peor en especial a usted Padre Fortea.
    Saludos

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  2. Olvidaba, hoy es el día de los ángeles de la guarda (2 octubre) no se les olvide por lo menos saludar al propio.

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    1. Muchas Felicidades Angelina, no se si hoy celebras tu santo, pero si es así te mando un abrazo fuerte. Saludos a tu hijo también.

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  3. En primer lugar, darle las gracias por los nuevos sermones que nos regala.

    Corruptos, venales y soberbios pero llenos de encanto. Richelieu, ora pro
    nobis.

    En segundo lugar llamar "llenos de encanto" a pontífices, cardenales y demás eclesiásticos que cometieron sacrilegio profanando sus votos, y viniendo de un sacerdote, no de un ateo, es por lo menos sorprendente.



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    1. Isabel, está siendo irónico :), yo le entiendo, en parte uno casi parece echar de menos esos tiempos pasados, en donde había esa porquería pero al menos se respetaba a la iglesia y se hacían maravillas como las catedrales que aún hoy nos duran.

      Pero también hay que pensar que la ruina de la iglesia es la recogida de la siembra de aquellos corruptos, quien siembra vientos más tarde recoge tempestades.

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  4. Hola Angelita,

    Feliz dia de los angeles custodios.

    Ya saludo al mio, y wl tuyo, jejeje, me alegra saber que tu tambien sigues sus bellas inspiraciones ;-)

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    1. Hola Sergio
      Si bueno trato, a veces que no le escucho nada. Pero hago el esfuerzo.

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  5. LA PALABRA DE DIOS NO ESTA ENCADENADA2 de octubre de 2014, 19:53

    Fortea:
    -"El magisterio es el magisterio, y sigue plenamente vigente."

    Bien dicho, Fortea. Estoy plenamente de acuerdo contigo. Pero.......
    Todos cometemos pecados: En el Antiguo Testamento, los sacerdotes y sus Jefes, desde Aaron hasta los tiempos del Señor, cometieron graves pecados. Y Dios los castigo.

    Precisamente, hoy en la mañana lei el libro del Profeta Malaquias. Y esto les dice el Señor: Cuando yo venga los purificare como el oro y la plata (y ya sabemos que el oro y la plata se purifican en el fuego del crisol). Y los pocos que sean escogidos le serviran para siempre.

    El sacerdocio, hoy, tiene una responsabilidad muy grande. En dos mil años de Cristianismo nunca antes se habia vivido una etapa de tanta corrupcion en los templos, en particular, y en el mundo, en general. Debemos admitir con humildad que hay manzanas podridas en la Iglesia; y en esto debe concentrarse el Papa, en limpiar el recinto sagrado.

    Malaquias dice muchas cosas mas, y llama a la reflexion.

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  6. El Santo Padre Francisco elegido por Dios y guiado por el Espiritu Santo, es la cabeza de la Iglesia, demos gracias por tanta generosidad con que Dios ha regalado a los cristianos uno de los papas mas acertados para nuestro tiempo, el con cada frase nos da a conocer el corazón de Jesús, su enciclica evangelium gadium es un tratado de amor alabanza y rendición a Cristo, quienes son sordos, ciegos espirituales tergiversan su pensamiento sus respuestas y homilias y se cumple que cuanto el diga sera utilizadopara desacreditarlo porque el enemigo de Dios eso es lo que busca.

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  7. Gracias Forty.

    Por tu claridad coherente en estos tiempos tan confusos.

    Te animo a que sigas asi.

    Tambien es necesario.

    Esta tarde, estuve en la hora santa adorando la exposición eucarística, pedí por tí y por todos.

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  8. Padre este post me recordó al de los laicos talibanes, no, nos conviene juzgar a nadie y menos a éstas personas que son tan especiales para nuestro Señor, lo mejor es que no nos cansemos de orar por ellos, y por nuestra iglesia que tanto sufre en estos tiempos. Un abrazo.

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  9. He leído el post, como siempre muy acertado, como todos los anteriores, pero hay un pero. No me gustan para nada esa velada crítica a los católicos de a pie, que, queriendo ser fieles con la Fe recibida, no transigen con ciertos usos y costumbre actuales, y me refiero especialmente a las que están de moda en nuestra Santa Madre Iglesia. No tenemos el ministerio sacerdotal, pero sí estamos bautizados, y por tanto, participamos de otro sacerdocio, el común de los fieles. Por todo ello, tenemos también ese don profético. No podemos callar, pues si lo haríamos cometeríamos un grave pecado de omisión. Por todo ello, es lícita la crítica en la Iglesia católica, y no acepto esa idolatría que ahora se extiende sobre el Santo Padre. Soy católico y por tanto debo obediencia al Sumo Pontífice, pero eso no significa que le deba un culto cuasi divino en todo lo que dice y hace. No. Y me importa muy poco que me llama "teólogo amateur", "fundamentalista"... o parecidas expresiones que escucho habitualmente. El Concilio Vaticano II nos ha dado a los laicos un papel importante en la Iglesia Católica, que antes no teníamos. Y claro que podemos hablar. Yo al menos lo hago. Y no sólo eso. También participamos de ese tesoro que es la Liturgia, la oración pública de la Iglesia, que antes nos era vedada. Y así son los cosas. Respeto y obediencia al Papa, claro que sí. Es el elemento de unidad, que nos une a todo. Rezar por él en este difícil momento de la historia, por su puesto. No hacer juicios temerarios sobre los nuestros obispos y menos del Papa. No hay ninguna duda, como bien decía el Padre Fortea, no tenemos muchas veces toda la información y a veces se hacen juicios temerarios, que pueden provocar escándalo, incluso cuando descubrimos hechos ciertos -verdades- a terceros que las ignoran. ¡Qué terrible responsabilidad! Pero, eso no significa que estemos condenados al silencio, y que podamos ejercer una sana crítica. En mi parroquia, por ejemplo. He trasladado a mi coadjutor mi sorpresa sobre una decisión del nuevo curso. Se organizan clases de bailes. Y claro, no creo que estamos en las actuales circunstancias para aprender el rigodón, y que el templo sea el lugar más adecuado para esas funciones. No juzgo si es bueno o conveniente. Y he propuesto que sería más conveniente un taller de oración, y le propuesto, incluso, a un grupo de seglares que se ocupan de tal menester, con notable aprovechamiento. Doy fe. Resultado. El silencio. Y claro que seguirán las clases de baile, con un gran aplauso general. Y así con todo. No soy oveja. Y no sé si oleré a oveja, pero de eso me cuido todos los días sobre todo por caridad a mis hermanos y a otros que aunque lejos de la fe también los considero hermanos. Puedo seguir. La fe es un compromiso de vida, y así lo entendí desde mi años de universidad. Y ante lo que se avecina no puedo ni debo callarme. Siento un gran dolor por todo lo que pasa en ella, y por el comportamiento nada edificante de sus ministros. Y ante esta situación de clara autodestrucción a la que se aplican algunos, no podemos permanecer impasibles. No son mensajes apocalípticos, como he leído alguna vez en el blog. Soy historiador y periodistas. Sé de lo que hablo. Estamos sufriendo la peor crisis de la Iglesia en sus dos mil años de historia. Más demoledora que la herejía de Arrio, el cisma de Occidente o el protestantismo. Esta es la verdad, y mientras no asumamos esta realidad, no encontraremos el remedio. Me importa muy poco que llamen talibán o teólogo de poca monta o aficionado. Pese a quien pese, yo también soy iglesia, tengo mi carisma propio y soy un inútil siervo de Dios, su instrumento para llevar este mensaje de salvación al mundo de hoy: Cristo ha resucitado, es nuestro camino, la Verdad y la Vida. Punto.
    Nota: Se mantienen las clases de baile en mi parroquia. Alguien quiere apuntarse. Le puedo dar razón y no cobro por ello.
    José Gabriel Concepción, un creyente, que no se considera oveja

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