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hola desde mi patria Costa Rica, padre usted tiene mucha sabiduría y alegria para decir y comentarnos sus experiencias, vaya trago amargo con su muela, pero deseo que ya se encuentre mejor. Saludos.
ResponderEliminarQuerido Padre, los que le conocemos, le leemos y lo estimamos sabemos que sí, su sacerdocio es como esa blancura de ese bello cuadro, y lo que menciona que sus pecados vistos desde la santidad de Dios deben ser muy grandes, me hizo recordar un pasaje de Santa Faustina Kowalska en una ocasión nuestro Señor le dijo "Si supieras como veo yo tu alma te horrorizarias", woao pensé yo, ella que era una verdadera santa ya en vida, que será de mí?, esa parte no me la podría imaginar porque me parece un tema tan elevado para mí, pero usted es un gran sacerdote, no solo honesto sino congruente y con muchas otras virtudes que seguramente lo hace muy grato a nuestro Señor, su paciencia como dice para aguantar es un síntoma muy claro de su calidad espiritual y que no se alcanza tan fácilmente. En realidad tal vez en este mundo no podremos saber porqué el Señor permite tanto sufrimiento a muchas personas, a mí también me duele mucho sobre todo cuando se trata de niños, a mí me ha tocado desde muy joven pero no me había preguntado porqué a mí cuando hay tanta gente tan sana y llena de vida, simplemente me ha tocado vivirlo y creo que por la misericordia de Dios no recuerdo haberme revelado, ruego al Señor que no lo haga, aunque no soy nada valiente, más bien soy chillona, ahora lo aprovecho mejor espiritualmente hablando, uniéndolo a la Cruz de nuestro Señor y a los sufrimientos de nuestra Señora, pero sí es una cruz muy difícil. Bueno han sido muy grandes mis pecados y creo que tal vez por eso también ha sido grande mi purificación, pero ahora que conozco más de éstas cosas, solo tengo que agradecer infinitamente a nuestro Señor, porque tal vez si no fuera así, tendría un lugar seguro en el infierno adonde de ninguna manera quiero llegar. Así que le pido al Señor que me de mucha paciencia hasta el último día de mi vida. Muchas gracias Padre porque a través de este blog y su sermonario, podemos entender un poquito más de estas cosas tan elevadas y tan bellas. Dios lo bendiga.
ResponderEliminarLa honestidad es una cualidad bastante escasa en nuestros días, y si el sacerdocio se traduce en esa blancura del cuadro que sobresale a mucha distancia, debe ser cuidada, el blanco es un color que con facilidad puede mancharse, el sacerdote esta más expuesto a peligros porque y todos sabemos están más en la mira del maligno.
ResponderEliminarHace poco me acordaba de eso de aguantar a los mentecatos y si, en eso le admiro, yo no parezco tener la paciencia ni la tolerancia para soportarlos, me asombra pensar que están esparcidos por todo lugar. Navegando con bandera de "buenas personas", "buenas intenciones" y haciéndole la vida de cuadros a cuanta persona se atraviesa en sus vidas. Pobre gente, imagino que algunos que como cuenta son hasta capitanes no sólo de su barco, sino de toda una flotallita ocasionando retrasos, dolores y estupidez (al menos la que quieren hacer sentir a todos los demás a su alrededor.
Dios deba ayudarles, pero imagino que si nos los topa debe ser porque debemos pedírselo a Dios, para que tan siquiera un alma muestre caridad luego de sus acciones. Es cierto Dios quiere actuar pero necesita que por lo menos haya uno que quiera salvarles venida esta petición de la caridad, del amor fraterno (solo pro ser seres humanos) y con más visión que la que es de estar padeciendo su mencatería (por llamarlo de alguna manera).
Padre Fortea, usted tiene la clave (inspiración del Espíritu Santo) para plantear un post con esa particular elegancia y hablar siempre desde usted porque es usted mismo quién se conoce más que algún otro.
Le pido a Dios que le bendiga y siga escribiendo aquí, allí en sus obras y para sus sermones tan amenos como interesantes.
Bonito domingo
El cumplimento y compromiso con Dios hasta en lo mas minimo da paz y tranquilidad, pero como dice: Ante la grandeza de Dios no somos más que aborrecibles pecadores,soportar con herocidad los defectos del projimo es una de las grandes virtudes, porque muchas veces es insoportable y desesperante callar palabras y pensamientos que lleven alpecado.
ResponderEliminarEn sus homilias si hay llamado a no pecar, a evitar ofender a Dios muchas de estas tratan pasajes biblicos pero allí hay un transfondo de como llevando una vida sin pecado alcanzaremos el cielo.
En cuentro distorsionado su comentario que nadie se preocupe por su salvación que no produzca angustia, si esta vida nos fue dada para encontrar a Dios y la muerte para unirnos a El, entonces el hecho de perderlo produce angustia y tristeza.
Bendiciones.
Padre Fortea, hace ya un buen rato que he llegado de participar por primera vez en la Adoración nocturna de Granada. Si viene alguna vez a esta ciudad, mire de reunirse un ratito con nosotras y dirigirnos unas palabras. Un cordial saludo.
ResponderEliminarPadre: se que es verdad, lo que usted dice, es usted un hombre honesto; a mi me consta. Como tambien me consta de que si tiene virtudes muy grandes y que mas de una vez me he admirado de ellas...
ResponderEliminarEstoy muy de acuerdo con la amiguita Lili Luz en cuanto a lo que ella opina. Espero, amiguita, de que su cruz sirva para su salvacion y la salvacion de aquellos que tenemos la buena fortuna de leer lo que hoy ha escrito.
Rocio
Me han gustado mucho los post de ésta semana pasada.
ResponderEliminarUn placer ver que todo sigue igual, tocando temas serios y a la vez temas personales como el dentista con su característico humor.
Un saludo
ResponderEliminar“Mis pecados nunca me han parecido demasiado grandes; mis virtudes tampoco. Estoy seguro de que mis pecados, vistos desde la santidad de Dios, deben ser muy grandes”.
Este es el tema Fortea, el tema es que los pecados son vistos desde la santidad de Dios, es decir, es Dios quien ve los pecados y Dios es santísimo, luego ve los pecados desde su santidad que es Él mismo. La santidad en Dios no es una cualidad o virtud de Dios, sino que la santidad es Dios. El tema de los pecados que nosotros llamamos “pequeños” es algo que todos tenemos que empezar a asimilar cuanto antes porque para Dios no existen pecados pequeños. Una ofensa de esas que llamamos pequeñas hecha a Dios es una gran ofensa no sólo porque Dios es santísimo, sino porque a nadie le debemos tanto como a Dios. Todo lo bueno que tenemos lo hemos recibido de Él y de nadie más, por eso no queda bien que delante de Dios hablemos de pecados pequeños. Reconozcamos pues, que no existen los pecados pequeños y que los únicos pequeños somos nosotros, no nuestros pecados.
Querido Padre Fortea: Compartimos muchos gustos, entre ellos la admiración por la vida sencilla, pegada a la naturaleza y vivida en familia, que llevaban los antiguos líderes romanos cuando llegaba el momento de su retiro, y ésa vida cotidiana es la que me interesa, cómo a usted, de aquellas sociedades, tanto la griega, cómo la romana y todas las que han ido sucediéndose a través de los siglos. Al igual que a usted, tampoco me interesan las grandes batallas, ni las glorias adquiridas en ellas por los distintos generales o reyes, sino ésa otra vida, la vida familiar, de descanso, de vivir.
ResponderEliminarMe recuerda a distintas escenas de la película "Gladiator", cuando el protagonista sueña con volver a su casa de campo, con su mujer y su hijo... pero otros se iban a encargar de impedírselo. La música que acompaña a las escenas que él cuando está muriendo se imagina, es bellísima y se integra perfectamente con las imágenes.
Me consuela pensar que no sólo soy yo la que no encuentra explicación lógica a muchas cosas que ocurren en la vida. Si usted que es todo un teologo y que lleva tanto tiempo dedicado exclusivamente a los estudios por y para Dios, no encuentra respuesta para todo, de qué me puedo extrañar yo. Así es que cómo sé perfectamente que sómos muy limitados porque Dios lo ha querido así, en el conocimiento de la grandeza que nos rodea, hago cómo usted, un acto de Fe, y pido a Dios que me dé fortaleza en ésa Fe para serle siempre fiel y dejarme llevar por el Camino que Él quiera para mí.
Ayer estuve casi toda la mañana acompañada de sus sermones, varios de los cuales compartí en facebook, y ésta mañana mientras me preparaba para ir a misa, he estado oyendo dos o tres más. Todos ellos me han gustado muchísimo, y me están ayudando mucho espiritualmente, pues aprendo mucho con ellos.
Gracias por todo querido Padre, y que Dios lo bendiga
Que Dios bendiga también al moderador y a todos los compañeros de comentarios.
Querido Padre Fortea: Compartimos muchos gustos, entre ellos la admiración por la vida sencilla, pegada a la naturaleza y vivida en familia, que llevaban los antiguos líderes romanos cuando llegaba el momento de su retiro, y ésa vida cotidiana es la que me interesa, cómo a usted, de aquellas sociedades, tanto la griega, cómo la romana y todas las que han ido sucediéndose a través de los siglos. Al igual que a usted, tampoco me interesan las grandes batallas, ni las glorias adquiridas en ellas por los distintos generales o reyes, sino ésa otra vida, la vida familiar, de descanso, de vivir.
ResponderEliminarMe recuerda a distintas escenas de la película "Gladiator", cuando el protagonista sueña con volver a su casa de campo, con su mujer y su hijo... pero otros se iban a encargar de impedírselo. La música que acompaña a las escenas que él cuando está muriendo se imagina, es bellísima y se integra perfectamente con las imágenes.
Me consuela pensar que no sólo soy yo la que no encuentra explicación lógica a muchas cosas que ocurren en la vida. Si usted que es todo un teologo y que lleva tanto tiempo dedicado exclusivamente a los estudios por y para Dios, no encuentra respuesta para todo, de qué me puedo extrañar yo. Así es que cómo sé perfectamente que sómos muy limitados porque Dios lo ha querido así, en el conocimiento de la grandeza que nos rodea, hago cómo usted, un acto de Fe, y pido a Dios que me dé fortaleza en ésa Fe para serle siempre fiel y dejarme llevar por el Camino que Él quiera para mí.
Ayer estuve casi toda la mañana acompañada de sus sermones, varios de los cuales compartí en facebook, y ésta mañana mientras me preparaba para ir a misa, he estado oyendo dos o tres más. Todos ellos me han gustado muchísimo, y me están ayudando mucho espiritualmente, pues aprendo mucho con ellos.
Gracias por todo querido Padre, y que Dios lo bendiga
Que Dios bendiga también al moderador y a todos los compañeros de comentarios.