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Hola, Forty,
ResponderEliminarNo, no es ser pesimista, es ser realista.
Estos días, estaba yo pensando precisamente en estas cosas.
Y sobre todo, en la cuestión, de que las personas que no tienen fe, y consciencia de fe cristiana (no opino sobre otras religiones y dogmas) cuando se encuentren de sopetón con problemas graves, guerras, etc, les va a pillar tan de repente, que espiritualmente no van a tener tiempo de pensar en salvarse de forma agónica físicamente, pues el estrés no les va a dejar tiempo de nada mas, ni siquiera para meditar.
A menos que se reciba una gracia de Dios y se acepte.
Si, yo también veo las cosas asi.
Sergio, ¿cómo estas?
EliminarYo apenas por aquí enterándome de todo lo que ha escrito el Padre Fortea, estoy impresionada con la palabrita de infrapesimismo, no estoy del todo de acuerdo, pero trato de aceptar que si lo ha dicho debe ser porque conoce más la situación que lo que yo pueda percibir.
Me gusta siempre pensar en la esperanza de la conversión, en la oración, en el no desanimo con pensamientos que más que ponernos con "las manos en la masa" nos instan a escandalizarnos y gritar el "pobre de nosotros", tal vez el implorar la misericordia de Dios.
No me escandaliza la realidad, pero me gusta pensar que mi esfuerzo y peticiones son escuchadas, tal vez si continuo así alguien más se contagie y cambie. Así poco a poco que Dios lleva otros tiempos o mejor dicho él tiene el tiempo.
Hola Angelita.
EliminarCuando venga el apocalipsis, yo no lo sé, pero lo que hay descrito, ha de suceder.
Pero tienes toda la razón del mundo, desde luego, por la fe, por la oración, y por las buenas obras cristianas muchos se convierten, y siendo así ayudamos a la providencia.
Se nota que llevas el cielo en tu corazón, sigue así.
Yo también hago lo que puedo.
Dios te bendiga.
Estimado PadreFortea,
ResponderEliminarCon todo el cariño y la prudencia de la que soy capaz, le ruego que se abstenga en un foro público como éste, a tratar de forma superficial asuntos tremendamente complejos. Lleva a equívocos. Por ejemplo, el matrimonio es sagrado en el caso en el que uno se case por la Iglesia. Si la boda la realiza un concejal de un ayuntamiento edificando a los contrayentes con un texto de por ejemplo Mario Benedetti o Eduardo Galeano, pues por mucho que nos pongamos esa unión no es sagrada. Es por ello que no hay nada malo en que se apruebe una ley que permita el divorcio. Salvo que ud esté a favor, (seguro que no) de obligar por ley a todo el mundo a casarse por la Iglesia, evitando así un futuro "divorcio". Siempre quedaria la anulación matrimonial, como se le fue recientemente otorgada a un famoso torero.
Es cierto que esto está muy mal, pero muy mal lleva desde hace muchisimos años, por ejemplo en 1950 en la India seguían como ahora viviendo en la absoluta miseria millones de personas, y en España uno no podía divorciarse. Quiere decirme entonces que ahora pasan más necesidad porque en España hay aprobada una ley del divorcio?
El origen del mal el en mundo, o de los males del mundo si se prefiere este último término, es algo más complicado que esto.
Sea prudente, no me caiga en los mismos errores de otros religiosos que con el mismo desparpajo afirman lo contrario que usted (en medios públicos claro) pretendiendo ir de "cristianos de base".
Por cierto que cuando escucho el término de "cristianos de base", siempre me acuerdo de mi abuela que si no recibe la comunión de manos del sacerdote es como si no hubiese comulgado, que eso de que se la de el vecino del cuarto...
Comparto todo lo que usted nos dice en éste su último post. La sociedad en treinta años ha dado la vuelta por completo, y lo que antes era tenido por bueno, ahora es malo y viceversa, y una de las consecuencias es el alejamiento de los Mandamientos de Dios, y todavía se va más lejos, la burla o el desprecio a quienes los siguen o los intentan seguir asistidos por la Gracia de Dios.
ResponderEliminarPero es que incluso en siete u ocho años, se nota la diferencia en la sociedad; una sociedad cada vez más atea o agnóstica y que vive cómo si Dios no existiera, bien porque no creen o porque ni se lo plantean. Y de ahí las consecuencias que usted enumera, y éso sin contar con el aumento de muerte violentas, suicidios...
Dice usted que si hubiera arrepentimiento y penitencia, aún así no sería optimista..., pero descuide Padre, que no lo va a haber.
Ayer estuve en la manifestación a favor de la vida y en contra del aborto en mi ciudad. De pena ver, las poquísimas personas que acudieron a la concentración. He llegado a la conclusión de que la gran mayoría de las personas pasan de ése tema cómo de tantos otros. Viven su vida llenos de egoísmo y centrados sólo y exclusivamente en su acomodo y su hedonismo. Lo demás les da igual.
Y de ello se valen los partidos políticos. Si supieran que la ciudadanía se les ponía totalmente en contra ante determinadas leyes, ya procurarían quitarlas y rápido. Pero saben que las conciencias están adormecidas, y que esos temas que en otros momentos hubieran sido escandalosamente controvertidos, ahora no mueven los votos de nadie.
Ayer me contaron algo que en caso de ser verdad, daría para estar muy preocupados.
Así que sea lo que Dios quiera.
Hola, "anonimo"
ResponderEliminarLeete otra vez el texto del padre Fortea, que me parece que no lo has entendido.
A principio de los años 80, la Iglesia en España defendía el valor sagrado del matrimonio frente al proyecto de ley de divorcio.
En cuanto a lo demás, pues filosofías, a miles.
Es impresionante el número de abortos en España, y si sumáramos los de los otros países como el nuestro en México, de verdad que no hay calificativo, lo que comenta que todos nuestros pecados repercuten hasta en la naturaleza, yo creo en todo lo que menciona en este post, y si no pudiéramos detener la ira de Dios porque verdaderamente no lo merecemos, al menos roguemos, imploremos por la Misericordia de Dios. Un abrazo.
ResponderEliminarPadre Fortea ya he expresado un mucho acerca de su post infrapesimista, creo que es la falta de sueño, yo también estaba como el animalito, bueno ahora mismo en los menesteres de la vida.
ResponderEliminarHace falta acabar con los dinosaurios de la desesperanza, ya tengo una foto para ello. Vea la foto dando click aquí
La realidad es dura, nunca antes se haya dicho lo contrario, en cualquier época que estamos desterrados, pero es que ¿acaso Dios nos deja?
¿acaso no los necios se convierten? ¿acaso no podemos conseguir de Dios todo lo que le pedimos con constancia, fuerza en la oración?
Me gusta la temática, es cierta la reflexión, mucho más en este día, en dónde incluso se hacen públicas las tonterías de los satanistas. Tal vez es un llamado didáctico a la conversión y no un infrapesimismo.
Pero ya se verá más adelante, aún incluso la iglesia sea más perseguida que ahora siempre hay esperanza.
Sólo hoy el evangelio hablaba del amor para todos, no importando el trabajo hecho, a todos les pagaba igual, por amor, en el reino de los cielos.
Saludos y le pido a Dios que le bendiga y le llene de esperanza.
¿Si hay conversión y penitencia porqué no se puede alejar la copa?
ResponderEliminar
ResponderEliminarYo tampoco creo que en la sociedad actual exista un camino de conversión. La ciudad de Nínive era humilde y por eso hizo penitencia, pero los ciudadanos del siglo XXI han hecho de la soberbia su forma de vida, y todos sabemos que la soberbia es incompatible con la conversión y más aún con la penitencia. También sabemos que un enfermo para curarse necesita primero reconocer que está enfermo, si no lo reconoce no hay curación, y la sociedad del siglo XXI no reconoce que está enferma, es más, me atrevo a decir que no sólo no reconoce su enfermedad sino que ha cambiado tanto su escala de valores que piensa que los enfermos somos nosotros, aptos para una tesis doctoral de psiquiatría.
Pero tampoco nosotros nos vamos a echar muchas flores porque también es cierto que somos mucho peores de lo que cabría esperar. Tenemos una santidad de zapatilla, si fuésemos santos como cabría esperar, esta sociedad estaría un poco menos mal; estaría un poco mejor, ¿tenemos que recordar lo que dijo San José maría: “Éstas son crisis de santos”. Si ellos, los que son como son, comulgasen todos los días como hacemos nosotros, serían mucho más santos que muchos de nosotros, pues para hacer lo que hacen, muchas veces hacen las cosas mejor que nosotros, que nos hemos instalado en la seguridad que da la fe. Nos hemos sentado en nuestra poltrona y desde esta garita de guardia miramos y juzgamos al mundo. ¿Y qué hacemos nosotros para mejorar el mundo? Seguramente mucho menos de lo que deberíamos de hacer.
Los abortos y la destrucción de la familia también son cosa nuestra ¿o no lo son? Yo pienso que si lo son. Por ejemplo, ¿cuántos ayunos a pan y agua hemos ofrecido por estas causas? Yo ninguno, vosotros no sé.
Jesús, el Señor, ofreció la vida con una muerte de cruz por nosotros, y nosotros ¿qué hemos ofrecido por la sociedad del siglo XXI? Pues, que el buen examen de conciencia que no nos falte, porque los demonios también creen y están condenados.
Tiene mucha razón, subrayo todo lo que dice.
ResponderEliminarEstar cobijado por el amor de Dios, nos da la esperanza de sobrevivir a las calamidades diarias, a las que vendran y que hemos provocado con nuestros pecados y ajenos.
ResponderEliminarEs necesario seguir orando por los que no creen, no alaban, no oran.
Los umbrales de la maldad se asoman en las actividades de muchos, en las leyes y gobiernos, en lo cotidiano todo pecado se ha convertido en norma de convivencia.
Y cuanto se asoma y vendra caera sobre todos buenos malos creyentes o no, la justicia de Dios es perfecta igualmente su misericordia, y aunque Dios sea mas bueno que nosotros, estamos viviendo las consecuencias del pecado generalizado que crece como la espuma y no va a parar.
La realidad supera la ficción las costumbres se degradan y vemos desmoronar muros ante nuestro asombro, esto no es una vision pesimista es el reino establecido por el mal.
Es imposible que tanta iniquidad siga y sea permitida, la palabra de Dios nos habla desde Moises de bendición y maldición, de bien y del mal, de premio y de castigo hasta el ultimo libro apocalipsis, que termina diciendo: Que el pecador continue pecando, que el inmundo siga en su inmundicia, que el justo continue en la justicia, el santo santificandose, yo voy a llegar enseguida, y llevo conmigo la recompensa que voy a dar a cada uno segun sus obras". ...fuera los perros, los hechiceros, los impuros,los homicidas, los idolatrastodos los que aman y practican la mentira,soy alfa y omega, soy principio y fin dichosos los que lavan sus vestidos para tener derecho al arbol de la vida y a entrar a la ciudad por las puertas".
ResponderEliminarTengo que decir que nunca había incluido en mi examen de conciencia lo que hago para evitar los abortos y la destrucción de la familia. No hago nada, absolutamente nada, como mucho unas pequeñas reseñas en los blog a favor de la vida del no nacido, pero esto es todo. ¿Y qué es esto? Esto es nada. Pero de esta nada sólo he sido consciente cuando estaba escribiendo el comentario, y aunque pueda parecer otro enfoque, estaba hablando de mí, de lo poco que me he preocupado por determinados temas como del que trata el post. Es muy fácil instalarse en la fe y pensar que con esto tenemos en 50 % de camino andado, pero si sólo tenemos esto no tenemos nada. Porque la fe no es el camino, la fe es el medio para andar el camino. Si la fe fuese el camino los demonios no estarían condenados. Seguramente pensaréis que son tantas las cosas por las que tenemos que ayunar: por la paz en Oriente Medio y en el mundo, por la conversión de éste o de aquél,… Pero también son muchos los días de que disponemos a lo largo de un año, y no siempre estamos trabajando, a veces estamos incluso con un mes de vacaciones, y un ayuno a pan y agua (con menos no creo que consigamos cambiar nada) son sólo 24 hs, ¿y cuántas 24 hs hemos dejado pasar en nuestra vida inútilmente? ¿Nos quejaremos si para nosotros también llega la “Gran Cuaresma”, nosotros que defendemos la vida del no nacido y cualquier otra vida, que defendemos el matrimonio sacramental, nosotros que pensamos que estamos más cerca del Señor porque rezamos varias horas todos los días del año, comulgamos todos los días, etc.? Pero nunca es tarde si cambiamos en la dirección adecuada; como Nínive, nosotros también tenemos que hacer penitencia.
Palabras sabias como inspiradas por el Espíritu de Dios, Padre Fortea, creo que ya la ira de DIOS se está viendo en muchos lugares, sobre todo donde se aprueba el aborto que es un pecado que ofende mucho a Dios que es el creador de la vida. Y si no cambian las leyes, de verdad sólo nos queda recibir el castigo según sea para cada cual. Sólo nos queda orar mucho.
ResponderEliminarHay que militar y dejarse de boludeces.
ResponderEliminarSomos meros instrumentos de Dios, todo situación tiene un motivo aunque por el momento no se comprenda, lo que es muy claro, que Dios no admite la pasividad, así que manos a la obra según los dones que el Señor nos da.
ResponderEliminarSaludos